Prevención del consumo de drogas y promoción de la actitud crítica
Desde ÀGORA siempre hemos creído que la Prevención era una de las mejores herramientas con las que puede contar una sociedad fuerte y sana. Actualmente estamos viviendo una época de fuerte recesión socioeconómica que pone en peligro el presupuesto de inversión escolar y por ende el gasto público en los programa de prevención escolar.
Por esta razón los centros educativos, las AMPAS y demás entidades dedicadas a la juventud deben apostar por la promoción de programas de prevención del consumo de alcohol y drogas.
PROGRAMA DE PREVENCIÓN DIRIGIDO A CENTROS EDUCATIVOS (Nivel Secundaria)
Este programa este especialmente dirigido a la entidad de mayor influencia entre los jóvenes, la comunidad educativa. Àgora ha diseñado talleres de aplicación en el aula para los jóvenes en los primeros ciclos de la E.S.O ,basados en la mejora de habilidades sociales y toma de decisiones en relación al consumo de drogas teniendo en cuenta los programas preventivos basados en la evidencia científica.
PROGRAMA PARA EDUCADORES/TUTORES
Los educadores se enfrentan cada vez a mayores desafíos, es por eso que la prevención de drogas es un ámbito demasiado importante como para ser dejado a la espontaneidad de la clase.Es por eso, que desde Àgora queremos ofrecer al educador formaciones específicas que les ayude a manejar “el tema de las drogas”en el aula.
PROGRAMA DE ASESORAMIENTO Y APOYO A PADRES/MADRES CON ADOLESCENTES
La adolescencia es un ciclo de cambios y de experimentación, de búsqueda de la propia identidad dentro del grupo de iguales y en relación con la familia. Una búsqueda que para ser realmente satisfactoria necesita del apoyo y el consejo familiar.
Desde ÀGORA EI, tenemos un soporte de Asesoramiento y Apoyo dirigido a las familias con hijos adolescentes a tratar el tema de las adicciones a las drogas y su prevención en familia. La mejor forma de evitar su consumo es hablando sobre ellas.
Desde Àgora ofrecemos diferentes estrategias de prevención en el consumo de drogas con tal
de educar y asesorar tanto a los jovenes
como a su entorno familiar y a la comunidad educativa.
¿Por qué intervenir en la adolescencia temprana?
La adolescencia es un período crucial para prevenir el abuso de drogas. Según publica el NIDA en su página (Instituto Nacional en el Abuso de Drogas) el uso temprano de drogas aumenta las probabilidades de problemas más serios de abuso de drogas y adicción. Las drogas cambian al cerebro y esto puede llevar a la adicción y a otros problemas serios. Por lo tanto, la prevención del uso temprano de drogas o de alcohol puede reducir el riesgo de que en el futuro se progrese al abuso y a la adicción.
El riesgo del abuso de drogas está más latente durante los períodos de transición, tales como un cambio de escuela, una mudanza o el divorcio. Si podemos prevenir el abuso de drogas, podemos prevenir el abuso de riesgo futuro. Durante la primera etapa de la adolescencia, cuando los niños pasan de la primaria a la escuela media, se enfrentan anuevos retos sociales y académicos. Con frecuencia en este período los niños son expuestos por primera vez a sustancias de abuso, como el tabaco y el alcohol. En la secundaria, los adolescentes se pueden encontrar con que hay una mayor disponibilidad de drogas y actividades sociales en donde se usan drogas.
Al mismo tiempo, muchos comportamientos que son aspectos normales del desarrollo, tal como hacer algo riesgoso o temerario, pueden aumentar las tendencias de los adolescentes a experimentar con las drogas. Algunos adolescentes tal vez cedan a las presiones de los amigos que abusan de drogas, para compartir estas experiencias con ellos. Otros pueden pensar que si toman ciertas drogas, como los esteroides, mejorarán su apariencia o rendimiento atlético o que si abusan de sustancias como el alcohol o el éxtasis (MDMA), podrían disminuir su ansiedad en eventos sociales.
Debido a que el juicio y la capacidad de los adolescentes para tomar decisiones todavía no están completamente desarrollados, su habilidad para evaluar los riesgos con exactitud y tomar decisiones sensatas sobre el consumo de drogas puede encontrarse aún limitada. El abuso de las drogas y del alcohol puede interrumpir la función cerebral en áreas críticas a la motivación, la memoria, el aprendizaje y el control del comportamiento. Por lo tanto, no es sorprendente que los adolescentes que abusan del alcohol y de otras drogas a menudo tengan problemas de familia o en la escuela, un mal rendimiento académico, problemas de salud (incluyendo de salud mental), y problemas con el sistema judicial de menores.
Recortes que han conducido a un grave descenso en los programas de actuación en la prevención del consumo de drogas y en los programas de investigación en el campo de las drogodependéncias.
Según la última encuesta estatal ESTUDES, que analiza la incidencia de consumo de drogas entre jóvenes de 14 a 18 años, llevada a cabo por el PNSD en el 2013 arroja los siguientes datos: Las drogas consumidas por un gran porcentaje de estudiantes de 14-18 años sigue siendo el alcohol, el tabaco y el cannabis, seguidas por los hipnosedantes (ansiolíticos e hipnóticos), la cocaína y el éxtasis.
La tendencia en el consumo de alcohol presenta un repunte en 2012. El porcentaje de jóvenes que se emborrachan se mantiene en niveles altos, 3 de cada 10 en el último mes. El cannabis es la droga ilegal consumida por un mayor porcentaje de jóvenes. El número de estudiantes que consume cannabis sigue siendo elevado. El consumo diario es de 2’7. Además el dato que más preocupa es el consumo ascendente del consumo de riesgo. El 16% de los que habían consumido cannabis, en el último año, tenía un consumo de riesgo. El consumo de riesgo se asocia a un peor rendimiento académico.